Éste último bloque de la asignatura, lo hemos dedicado a la creación literaria.
Gracias al estudio de este bloque hemos aprendido numerosas
estrategias que podemos utilizar en el aula para inventar cuentos, poemas,
obras teatrales… pero además de mejorar la expresión escrita con este tipo de
actividades también podemos destacar otros aspectos positivos:
- Mejoraremos la expresión oral, la gramaticalidad, la ortografía, la creatividad… Y todo ello sin hacer aburridos cuadernos de ortografía o de gramática. ¿No creéis que es una buena forma de aprender?
- Con esta actividad tratamos de fomentar la creatividad de los niños. Durante los 3 años que llevo en la Universidad de la Salle he aprendido numerosas estrategias para ello. Debemos aprovechar la espontaneidad innata que tienen los niños y que con el tiempo se va perdiendo. Hoy en día hay cientos de actividades muy divertidas que se pueden utilizar para inculcar en los alumnos el gusto por escribir.
- Con este tipo de actividades podemos ayudar a que los alumnos se comuniquen y trabajen en equipo, tanto con otros compañeros como en casa con los padres y/o hermanos.
Este bloque, como los anteriores, me ha hecho reflexionar
sobre mi pasado… No sé si es que la asignatura de lengua no me gustaba
demasiado, pero cuando me mandaban hacer una redacción o crear un poema se me
caía el mundo encima… Iba con el cuaderno deambulando por toda la casa
intentando conseguir ideas de cada miembro de mi familia… Siendo sincera, en la
actualidad a veces también lo hago.
De todas formas, tengo la sensación de que
mi familia es más de ciencias que de letras y siempre están dispuestos a ayudar
con los problemas y menos a repasar lecciones de memorizar o buscar la
inspiración para alguna redacción. OJALÁ el colegio y yo hubiésemos puesto más
interés en el tema de la creación literaria porque creo que es una actividad
muy enriquecedora y sobre todo, gratificante… Cuando ya eres mayor, abrir tu
caja de cursos pasados y leer cuentos, poemas, obras teatrales que hiciste
cuando eras pequeño, no tiene precio. Alguna vez lo he hecho con mis hermanos y
nos morimos de la risa. De todas formas, la práctica es la base fundamental de
cualquier aprendizaje y a escribir se aprende ¡escribiendo!
Durante estos tres años me he ido concienciando en la
importancia de la creación literaria y me comprometo a dar el 100% cada día
para conseguir que mis alumnos adquieran el gusto por la escritura y que no
suponga un esfuerzo sino un”juego” con el que lo pueden pasar muy bien y con el
que aprenderán muchísimas cosas.
Respecto a la actividad voy a explicar cada uno de los géneros:
- La prosa: creo que es la más fácil de todas y que con un poquito de imaginación y tiempo suficiente para escribir puede salir algo bueno. Fue divertido estar pensando en cosas sobre las que escribir y el hecho de haber estudiado la teoría de la literatura me dio que pensar. Lo que más me inspiró fueron los 31 puntos recurrentes de Vladimir Propp y lo que decía de que los cuentos siempre tenían el mismo patrón. Ahí se me ocurrió… ¿y si las cosas fuesen totalmente diferentes a como hemos imaginado siempre?
- La poesía: pensé y pensé y no se me ocurría nada original para incluir en una poesía. Al cabo de un tiempo me di cuenta que he pasado un año en Suecia y que en mi blog me gustaría que quedase reflejado, por lo que después de hacer una lista de cosas que me llamaron la atención, lo convertí en poesía.
- El teatro: esta historia tan graciosa pasó de verdad y cuando me enteré de lo que trataba esta actividad no dude en incluirla.
- Y, por último, una canción que creamos mi grupo de trabajo de una asignatura de Suecia. Teníamos que hacer un videoclip escribiendo nuestra letra e inventando una melodía. Pensé que incorporar esta “poesía” en la actividad sería positivo porque se está incrementando la impartición de una enseñanza bilingüe y nosotros futuros profesores debemos ser conscientes de ello e incorporarlo a nuestro mundo universitario y laboral posteriormente
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